Hola.
Somos Belén y Mar, las responsables del equipo de Psicología de Ovida. Llevamos apoyando a nuestros residentes desde que abrió el centro, hace ya 12 años, en 2009. Desde entonces, nuestra experiencia ha crecido a una velocidad de vértigo, como también la demanda de los residentes (o sus familias), que han convertido nuestros servicios en parte esencial de su rutina y de su bienestar emocional. Trabajamos de manera continuada en todas las unidades y con toda la familia que integra nuestro centro.

Cuando una persona se decanta por Ovida como residencia –bien sea de manera continuada o para una estancia temporal-, al inicio de su estancia realiza una entrevista con nuestro departamento de Psicología. A través de la misma, valoramos en qué áreas sería interesante trabajar con él o ella, y le trasladamos un plan personalizado en el que le explicamos qué talleres consideramos interesantes para que pueda trabajar sus funciones cognitivas o afectivas, tanto las que queremos mantener como las susceptibles de reforzar o estimular. De este modo, se favorece la adaptación de la persona que llega al centro, haciendo una transición suave y adaptada a sus preferencias y su estilo de vida (se aconseja y motiva su participación, pero nunca de forma obligada y siempre respetando su decisión, intereses y gustos). Anualmente repetimos y actualizamos esta valoración. Y, en cualquier momento, en caso de que percibamos algún cambio significativo se realiza un nuevo estudio de la situación junto con el resto de nuestro equipo sanitario interdisciplinar, y trazamos un plan integral de seguimiento con el apoyo de los especialistas que necesite esa persona.

Dentro del plan de cada residente, ofrecemos diversas actividades, como los programas de psicoestimulación, que se llevan a cabo principalmente por las mañanas. El objetivo de estos programas es estimular las diversas áreas cognitivas (orientación, lenguaje, cálculo, memoria, atención) a través del diálogo, así como de diversos materiales como pueden ser papel y lápiz, tablets, móviles y otros objetos cotidianos.
Por las tardes, realizamos actividades de tipo psicoafectivo, más orientadas a fortalecer la sociabilización y el bienestar emocional: talleres de relajación, talleres lúdicos y también de creatividad.
Todos ellos se llevan a cabo de forma grupal. Se realizan de lunes a viernes, con una duración aproximada de 45 minutos, normalmente en las salas de actividades de cada unidad, que dejamos abiertas a la participación de todas las personas que viven en esa planta.
Además, en el día a día, procuramos apoyo emocional de forma individualizada a aquellos residentes que lo solicitan, así como a quienes detectamos que lo precisan. Este servicio ha tomado especial relevancia en los últimos tiempos, en los que ha resultado difícil comprender la falta de visitas, y sobre todo, la realidad que se está viviendo fuera del centro. El apoyo psicológico se ha vuelto esencial para muchas personas en un momento en el que las familias no están tan presentes, y hemos procurando que se sientan acompañadas y escuchadas y, sobre todo, comprendidas.

También, con frecuencia, se realizan funciones de mediación ya que, como es normal, existen conflictos en la convivencia, intentando buscar soluciones y sobre todo, facilitando la buena armonía entre tod@s.
En ocasiones son los familiares quienes acuden a nuestro equipo para solicitar información del estado emocional y cognitivo de la persona. En ese contexto, buscamos junto con ellos soluciones conjuntas a sus preocupaciones, bien de forma directa o a través de otros profesionales. En esta misma línea de cooperación con las familias, también es nuestro departamento el que funciona como punto de unión entre el residente y su familia, facilitando el contacto a través de videollamadas; esta función se ha convertido en un punto esencial para familias y residentes, dado que la labor de intermediación en la comunicación no es siempre sencilla, y hemos desarrollado herramientas y habilidades para tratar de ir esquivando las dificultades que este tipo de comunicación supone para las personas que sufren deterioro cognitivo, muchas veces por la propia incomprensión de las nuevas tecnologías. Se trata de un esfuerzo importante y un punto en el que ponemos mucha energía, conscientes como somos de su vital importancia, ya que sirve para que el vínculo familiar se mantenga.

Sabemos que, en este momento más que nunca, nuestra labor y la de todo nuestro equipo es esencial para los residentes y sus familias. Por ello, si tienes cualquier duda, puedes contactar directamente con nosotras a través del correo psicologia@ovida.es y te atenderemos a la mayor brevedad.
Estoy feliz de encontrar posts donde hay informacion tan util como esta. Gracias por poner este post.
Saludos